No sé cómo llegué a las equivocadas ideas que tengo.
Sé que lo correcto es amar a tu patria,
pero yo prefiero amar a la humanidad.
Dios es para mí una complicación innecesaria,
aunque para el común de los mortales sea la solución.
No sé cómo me llegué a ideas tan equivocadas,
pero, ya que las tengo, me las quedo.